Aprendizaje Creativo
Afirma el reciente informe de la UNESCO que "sostener y favorecer la dignidad, la capacidad y el bienestar de la persona humana en relación con los demás y con la naturaleza debería ser el propósito fundamental de la educación en el siglo XXI".
Esta visión humanista de la educación, entendida como un bien común que procura el desarrollo de cada persona en un mundo globalizado, multiculural, complejo y cambiante, invita a replantear el propósito y la organización de la educación. Propósito y organización que afecta a todos los elementos de los sistemas educativos pero que se expresa de forma dramáticamente urgente en la formación que se desarrolla diariamente en nuestras aulas y en nuestras escuelas cada día.
Replantearse el propósito de la educación y su organización no es tarea exclusiva de expertos internacionales, es una tarea de todos. Y los educadores no podemos permanecer al margen del debate y, menos aún, de la acción determinada para replantear la educación y llevarla a cabo en nuestras escuelas e institutos.La creatividad y la innovación deben formar parte de esta nueva educación que necesitamos.
Aplicar la creatividad en la educación es educar para el cambio y formar personas ricas en originalidad, flexibilidad, visión de futuro, iniciativa propia, confianza, gestión del riesgo, experimentación. Es prepararlas para afrontar los obstáculos y problemas que se les van presentado en su vida escolar y cotidiana. Es ofrecerles herramientas efectivas para la innovación que resulta imprescindible para que toda organización progrese en su entorno.